La vesícula biliar es un órgano que almacena la bilis, la cual ayuda en la digestión de las grasas. Cuando no se consumen grasas, la bilis se estanca, lo que en muchos casos conduce a la formación de cálculos.
Si los cálculos bloquean los conductos biliares o provocan inflamación, puede ser necesario extirpar la vesícula biliar.
Sin embargo, esto se puede evitar. Un punto importante a tener en cuenta es que las grasas no son enemigas, sino una parte esencial de una dieta equilibrada.
Son necesarias no solo para la función biliar, sino también para la absorción de vitaminas liposolubles (A, D, E, K), el mantenimiento del equilibrio hormonal y el funcionamiento del cerebro.
Grasas saludables que se recomienda incluir en la alimentación: aguacate, pescado (salmón, atún, caballa), aceite de oliva y de linaza, frutos secos y semillas.
